22 marzo 2018
A pesar del desaire que hizo el ahora derrumbado PPK hacia el presidente Nicolás Maduro en la Cumbre de las Américas, la Cumbre de los Pueblos sí quiere que el mandatario asista a dicho encuentro popular.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, está invitado a la Cumbre de los Pueblos, una reunión de sindicatos y colectivos sociales de Latinoamérica alternativa a la Cumbre de las Américas, a la que el mandatario venezolano no está invitado a asistir por el Gobierno de Perú, anunciaron sus organizadores.
Al encuentro organizado por el Comando Nacional Unitario de Lucha (CNUL) de Perú, que integran sindicatos de trabajadores y de estudiantes y organizaciones indígenas y feministas, también fueron invitados el resto de presidentes de Latinoamérica y algunos expresidentes de carácter progresista.
“Tenemos la buena voluntad de escucharlos y que ellos nos escuchen, pero obviamente preferiríamos que vengan los presidentes progresistas, nacionalistas y socialistas”, comentó Winston Huamán, presidente de la Federación Nacional de Trabajadores de las Universidades del Perú (Feentup).
“Es una jornada de defensa de la soberanía nacional y la autodeterminación de los pueblos. Tiene un sello antiimperialista porque Estados Unidos, el imperio del norte, todavía controla la región”, denunció Huamán, quien también ejerce de vicepresidente de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP), la mayor central sindical del país.
La también vicepresidenta de la CGTP, Carmela Sifuentes, pidió al Gobierno peruano reconsiderar la retirada de la invitación a Maduro para la Cumbre de las Américas, lo que calificó como “un retroceso” y “una vergüenza”.
Sifuentes afirmó que en la Cumbre de las Américas tienen que estar todos los presidentes porque “todos tienes derecho a asistir y tener un diálogo alturado”.
La integrante del bloque de izquierdas Nuevo Perú Anahí Durand matizó que la invitación a Maduro para la Cumbre de los Pueblos no es una defensa o apoyo a sus políticas y medidas sino una demostración de voluntad de diálogo.
Durand consideró “casi una paradoja” que el tema de los debates de la Cumbre de las Américas sea la gobernabilidad democrática frente a la corrupción.
“Son más bien los pueblos los que tienen que dar alternativas, porque son las organizaciones las que sufren las consecuencias de esa corrupción que afecta directamente a los bolsillos de la población. La idea es devolver el protagonismo a la gente”, dijo Durand.